¡Imini yokuzalwa emnandi! :: ¡Feliz cumpleaños!

18 DE JULIO DE 2008, imagino Sudáfrica como un país jubiloso que en las calles no deja de rendir homenaje a su héroe, y sinceramente paso envidia.

La idea de la asociación 46664 de crear una tarjeta de felicitación inmensa para Mandela, me llenó de alergia y estos fueron los mensajes que le dejé:

1. NELSON MANDELA HAPPY BIRTH DAY ¿Qué le puedo decir a mi héroe? ¿Cómo agradecerte que seas mi ejemplo en los momentos flacos? Si hay alguien a quien quiero emular es usted, nuestro gran sabio. A ti, amigo Nelson: ¡Imini yokuzalwa emnandi! Desde la tierra del Quijote

2. NELSON MANDELA HAPPY BIRTH DAY. Amigo Nelson, tú que eres mago regala al mundo tu eternidad.


Ahora, solo queda esperar que los lea, jejejeje


En fin, para ser tan habladora y de vez en cuando quedarme sin espacio para escribir, hoy no sé qué decir.

Diría que me llenaría de satisfacción estar en su país y estar presente en su fiesta de cumpleaños, porque para mi este hombre de 90 años simboliza lo mejor del ser humano con esa voluntad de hierro, esa fe todopoderosa capaz de esperar luchando sin rendirse nunca, aún dejando en un forzoso segundo plano a la familia que tanto ama, porque por sus ideales estaría de puesto a morir y ya lo ha demostrado.

Iría a su hermosa tierra sólo por verlo sonreír y estrecharle la mano. La misma sonrisa que iluminó la oscuridad más aterradora, y las manos curtidas por los trabajos en la cantera de Rooben Island, con las que firmó la paz conciliando al afortunado país cuya paz llegó para no marchar, porque quedo hechizado por su don.

Le regalaría una botella de Pantem Azul, porque aún es joven, porque aún le quedan viajes que hacer, cenas con la realeza, y sobre todo discursos que dar. Sinceramente, no estamos preparados para su jubilación y retiro, y ni mucho menos para dejar de oírle, con su voz dulce, hablar en nombre de la Paz, la misma que lo eligió como representante en la Tierra.

Jugaría con usted al ajedrez, el juego de las estrategias en el cual negociar es un arte, donde usted que redefinió el concepto político quitándole las connotaciones negativas, supo moverse hallando la Paz a ningún precio, aunque bien que pagaron y pagó por ella. Pero como usted dice, se necesita tal grado de opresión para alcanzar tales alturas de carácter. Y hallé en su vida el caso.

Si, Mandela, gracias por elegirme, y si en algún momento de nuestras vidas llegamos a coincidir, y me necesita, sólo piádmelo, que en xhosa, castellano, o inglés le diré GRACIAS.

Y hoy, ¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS!!